lunes, 30 de julio de 2012

Así las cosas dan ganas de no limpiarse los oídos

Desde que voy al gimnasio he conseguido lo que me proponía: dormir como un bebé. Tuve unos cuantos meses de pasarlas putas para dormir y el agotamiento con el que regreso del gimnasio hace que caiga a plomo en la cama. Además, si con ello mejoro el rendimiento de mi corasonsito y pulmones y me pongo algo güena, pues mejor que mejor.

Con lo que no contaba era con la mierda de música que me toca tragarme en cada clase. Por dios, estoy hartita ya de Rihanna, Pitbull, David Guetta, Swedish nosequé mafia y la madre que los parió. Y es que además hay veces que una misma canción me toca tragármela en distintas versiones/remixes en las diferentes clases.

Pues hoy es una queja sobre Spinning. Recuerdo que tenía una profesora guay que no hacía clases de Les Mills (que son las que siguen en este sitio) y que se montaba sus propias listas de canciones. También me tocaba torturar mis oídos, pero de vez en cuando tocaban cosas como Foo Fighters o The Cardigans.

Pues ahora me ponen Coldplay. Bajona del quince. Con la mierda del último disco (Paradise, que cada vez que la empiezo a escuchar me pienso que es I wish I could fly de Roxette). Que ya puestos, podría haber sido algo del Parachutes o A rush of blood to the head. Mira que sí me podría imaginar pedaleando al ritmo de Clocks, por decir una, o hacer los estiramientos finales con el Trouble.

Creo que me voy a hacer mi lista alternativa. Podríamos tener... Ready to start, para calentar, Munich, para hacerse unos sprints, Conscience killer, pendientes de ritmo infernal (gimme a little room and I'll speed in your eye), Strange times para marcarse unos intervalos, para que el profesor no se queje porque se ve que le va la electrónica, le puedo poner Pogo o D.A.N.C.E. Y para otra subida brutal, ¿qué tal un Take me out?

Y para terminar, apoteosis con Knights of Cydonia.

Anda que no iba a pedalear hasta morir así...

martes, 24 de julio de 2012

Pues va a resultar que tengo suerte y todo

Como ayer mi bici se jodió, hoy la he cogido y enfilado hacia la tienda de bicis. Me ha recibido el chico guapete de la otra vez y le he ido a explicar mi problema de la válvula.

El caso es que desde hace semanas había notado que la rueda de delante basculaba sobre el eje. Pero es lo típico que vas dejando, vas dejando hasta que te fostias. Hoy mientras arrastraba mi vehículo veía que la rueda no paraba de rozar el guardabarros y la dinamo de la luz, así que tenía en mente comentarlo.

Pues cuando el chico ha ido a tocar la rueda ha puesto cara de flipe y ya hemos pasado de "uy, que la válvula está rota" a "esto es peligroso y podrías perder la rueda (y los dientes) en cualquier momento". Y como yo tengo mi bici en alta estima (y aún más mis dientes), pues le he dicho que me la arregle. Y el tío todo apurado porque ponerme una rueda de segunda mano más la mano de obra serían 30 euros. Hombre, que yo pagué 60 euros por la bici entera hace ya casi 2 años y medio. Que después de tanto tiempo "solo" esté a punto de perder una rueda, ya me parece bien. Pagaré el 50% del valor de la bici para que siga funcionando. Que le he cogido cariño.

Así que menos mal que se fastidió la válvula. Si no me pego el hostiazo de mi vida mientras mi rueda me adelanta.

lunes, 23 de julio de 2012

¡Qué planes ni qué ocho cuartos!

Por primera vez en unas cuantas semanas voy a coger la bici. Digo, anda, pues voy a salir 5 minutillos antes que tengo que inflar las ruedas, así me da tiempo para pillar el tren de y media. Vale. Salgo antes, inflo la rueda de atrás, perfecto. Voy a por la de delante, bien. Quito la bomba para cerrar la válvula y se sale el aire. Repito operación un par de veces. Desmonto la válvula. Mierda. Toma, válvula a tomar vientos. Bueno, son ya casi y veinte así que no llego al tren. ¿Me llevo la bici ya para que me la arreglen en la tienda? Ah, pero que hoy es la carrera ciclista esa que pasa por el centro del pueblo y la tienda está justo en el circuito. Coño, pues ya quizá mañana si eso. Ale, a patita a la estación y a por el tren de en punto.


sábado, 21 de julio de 2012

¿Dónde está la cámara oculta?

Hace como cosa de un año, en una noche maldita que recordamos de vez en cuando por la acumulación de despedidas de soltero por metro cuadrado, entre la gente que se nos aproximó, un calvete con ojos de loco empezó a preguntar que de dónde éramos. Como una amiga le dijo que yo era española, se vino para donde yo estaba a hablarme en algo que él pensaba que era español. Como su inglés era tan maravilloso como su español, la conversación fue ciertamente pesada y difícil. Me preguntó la batería de preguntas del inquisidor holandés: ¿Qué haces aquí en Holanda? ¿Vives aquí? ¿Desde cuándo? ¿Y por qué te has venido desde España? ¡Si allí tenéis mucho sol! (siempre volvemos a la idea que tienen estos tulipanes de que en España debemos hacer la fotosíntesis y vivimos de ello), etc. etc. Me pidió mi facebook, le dije que no tenía (xD) y al final le di un email basurero para que se fuera con viento fresco. Creo que me escribió alguna vez, con ese español tan suyo, y me dijo que tenía familia en Salamanca. No le contesté y ahí se quedo la cosa.

Ayer salimos en tropa unas cuantas chicas, 4 españolas, una francesa. Estábamos en una aglomeración bailando (o intentándolo), cuando por el rabillo del ojo veo un calvete que me mira y me da un toquecillo en el hombro. Le miré y creo que entré en pánico. ¡Era él! Horror, ¿me habrá reconocido? ¿se acordará? ¡Socorro! Pues resultó que no se acordaba (fiiuuuuu), pero volvió a repetir su papel de inquisidor. Oootra vez a responder, con toda la desgana del mundo, a sus preguntas en ese español tan... tan. Al final me escaqueé y mi amiga francesa, que estaba conmigo aquella noche me comentó que la cara le sonaba. Le dije de dónde y nos estuvimos descojonando un buen rato. Luego el calvete estuvo hablando con otra de las españolas y al final se dio por vencido. ¡Y esta vez sin pedir el caralibro! Bieeen.

Y para terminar, la foto de mis compras de hoy:
Aunque lo parezcan, no son donuts, ¡son paraguayas! Así como que apetecen aún más, jaja.

jueves, 19 de julio de 2012

Y llueve, llueve, llueve y vuelve a llover

La vuelta ha sido dura. Me recibió con frío y lluvia (y mi paraguas en los confines de mi maleta, entre la bolsa de playa reconvertida en bolsa de gimnasio y la ropa interior). Y con lluvia seguimos. La verdad es que los caminantes del vierdaagse mucho calor no están pasando, pero que te diluvie como ha estado hoy sin parar (más el viento) no creo que sea tampoco muy agradable. Imagínate, de 30 a 50 km con la lluvia metiéndose en tus ojos. ¡Y calcetines!

Ayer me preguntaron por qué se camina en el vierdaagse, que cómo empezó todo. Ni siquiera los holandeses lo saben (o por lo menos no los del curro).

Así que tirando de Google y la Wikipedia he visto que tiene su origen en los profesores de educación física, que a principios del siglo XX en Holanda eran antiguos militares. Formaron una asociación de educación física y organizaron unas marchas de 4 días que al principio eran por todo el país. Durante la Segunda Guerra Mundial se canceló, pero tras ella Nijmegen revivió la Marcha.

Y ahí termina el cutre-resumen. Ya sé por qué caminan 4 días. Era más interesante vivir en la ignorancia. Le daba cierto misterio ¿no? Como a muchas cosas en esta vida.

Por cierto, que el otro día en el aeropuerto eché un ojo a un libro que contaba anécdotas de dueños de librerías y me estuve echando unas risas:

Es un mundo cruel, sip. ¡Y sin dibujos!

miércoles, 11 de julio de 2012

¿Que nos quiten lo bailao?

En estas 2 semanas en España me deprimen las noticias aún más que cuando las leo en la distancia por los periódicos digitales.

Subidas del IVA, recortes sociales (reducir el paro para que la gente encuentre trabajo que no hay??), corrupción (como siempre) y así non-stop. Solo parece que hay algo de esperanza al ver la cantidad de gente que esperaba ayer a los mineros, como si fueran Casillas & cía. Una pena que eso no lo retransmitieran.

Ayer pasé por esta rotonda horrenda (por dios, qué horror) y me dio por pensar la pasta gansa que se dejaron los ayuntamientos en épocas de vacas gordas en esculturas como esto:

Asco de país...

lunes, 9 de julio de 2012

Yo y mis circunstancias (II)

Lugar: cercanías de vuelta a casa. Hora: 5:45 de la mañana. Situación: estoy en el asiento pegado a la ventana de esos grupos de cuatro, medio muerta, dando cabezaditas. Llegando ya para Puente alcocer, el chico que en Atocha me ha preguntado si ese era el tren para Puente Alcocer me pregunta: "¿Y tú para dónde vas?" y me hace ojitos. Abro un poco más los ojos y a través de las legañas que empiezan a formarse le veo todo delgado, lleno de granos y parece como que en vez de afeitarse el bigote se lo depiló con cera. "¿Esta no es ya tu parada? Yo sigo un poco más". En plan, déjame niño, que tengo sueño. Y me sigue preguntando con vocecilla, que, supongo, para él es su voz de ligar. "¿Pero vives muy lejos?", me descojono un poco (también es que seguía aún un poco alcoholizada), "Uy, sí, en Holanda" (y me voy en este tren). Como estaba un poco dormida no recuerdo muy bien la conversación, pero me preguntó mi edad, se la dije, y entonces, en plan ya cabrona, le dije: "Y déjame adivinar, tú debes tener 22". Pues tenía 21, pero es que cumplía los 22 ese año. Ains. Estos yogurines. Me dijo que no aparentaba mi edad (pero por dios! tanto como para que me entre uno de 21!!!), que era muy guapa y que si me acompañaba a casa. Pues no. "Y me acompañas tú a la míaaa?". No. Y seguí durmiendo.

Lugar: la calle para la estación. Hora: 18:10 de la tarde. Situación: voy andando por la calle para ir a la estación de tren. Como he quedado con unos amigos a tomar unas cañas, voy con un vestido, unas sandalias sin tacón y un bolso. Gafas de sol para no quedarme ciega. Me aproximo a un bar que está en una esquina. Tres hombres de entre, no sé, 45 y 60 hablan animadamente. De repente cuando paso noto los ojos de uno, otro sigue hablando y se callan. A los 2 metros oigo: "Eso sí que es una mujer". Joder, debe ser que a estos no los engañé con la edad.

PD. Acaban de decir en las noticias que un jugador de la Sub-21 de fútbol se ha tenido que ir para casa porque tenía varicela. Aparentemente, no soy la única que sufre de "don de la oportunidad". Pobre.

miércoles, 4 de julio de 2012

Bilbo Bolsón Higgins y otros viajes

La noticia de hoy (además de relacionas con la crisis, como que han admitido una querella contra los chorizos de Bankia) es que han descubierto una partícula que podría ser el bosón de Higgs (mi tesssshooooroooo).

Pero como hace unos cuantos días que no cuento ná, voy a ver si me acuerdo de los últimos acontecimientos... (la imagen ondula).

El sábado, a pesar de las predicciones agoreras de Buienradar, nos salió un día de puta madre para estar en un festival al aire libre (el Rockin' park de Nijmegen, por el "módico" precio de 75 lereles, y que de 60000 entradas, solo vendió 20000). Aquello estaba plagado de gambas, perdón, de holandeses tumbados al sol como quien pone una chuleta en el grill. Nosotros entre gorros, pañuelos y chaquetas nos tapamos la cabeza y nos untamos varias veces de crema, lo que ni aún así evitó las rojeces (así que para imaginarse cómo quedaron las gambas...).

Y lo de siempre en sitios como esos: vasos volando, gente sudorosa y apestosa, que temes el momento en que el cantante de turno animará a agitar los brazos en el aire porque hay riesgo de desmayos colectivos. Borrachillos y borrachuzos silbando y cantando a gritos, saltando, correteando a tu lado con alguien en sus hombros... Estilismos de todo tipo: de modernos y modernas a hippies, padres y madres de familia con los niños, rockeros tatuados, pijas tatuadas, señoras echándose la siesta con la boca abierta mientras dEUS lo petan.

Y por fin vi a mis adoradísimos Elbow, que se me hicieron cortíiiiisimos, con maravillas como esta:


Ya para el domingo tocó recuperarse y ver el partido de España. Bueno, de eso poco que contar, solo que nos metimos una buena barbacoa de pinchos morunos, jejeje. 

Y el lunes viaje. Sí, eso que tanto me gusta y por lo que soy mundialmente conocida por mi suerte. El viajar... Como mi vuelo salía a las 12:15 empecé a calcular, a ver 2 horas antes son las 10:15, ponle las 10, sería el tren de las 8:30, pero como es primeros de julio y estos tulipanes se van de vacaciones en estas fechas, vayamos mejor media hora antes, porsilasmoscas, que no tengo la tarjeta de embarque y voy con la maleta y... Me pillo el tren de las 8 y en la primera parada se estropea el tren. Resultado: me toca esperar a que pase el tren de las 8:30. Si es que así no se puede!!

Y todo para que cuando llegue por fin a la puerta de embarque nos digan que el avión aún no ha aterrizado desde Madrid y que tardaremos 30 minutos más. Que luego nos tuvieron otros 45 minutos más sentaditos en el avión para que nos dieran pista. Y que luego tardamos un poquito más en que nos dieran pista para aterrizar. Conclusión: 16:15 de la tarde, casi hora y media más tarde, con un hambre que casi me da algo y muerta de calor en mi ropa-para-aguantar-los-frescores-holandeses. 

Salgo, espero la media hora rigurosa para mi maleta y cuando saludo a mi padre le pregunto qué me ha hecho para comer: NADA, pensaba que había comido ya. T_T Menos mal que había ensaladilla en la nevera.

Y ahora... a disfrutar los calores por aquí :D